lunes, 17 de mayo de 2010

Rudo operativo policial en la frontera entre Guerrero y Oaxaca, en la Costa

Retén, en la entrada poniente de Cuajinicuilapa

16 de mayo

Sorpresivo y rudo fue el operativo que distintas corporaciones policiacas, federales, estatales y municipales, ejecutaron en el municipio de Cuajinicuilapa, en la frontera entre los estados de Guerrero y de Oaxaca, los pasados días 14, 15 y 16 de mayo, sin que se conociesen los objetivos ni los resultados, ante la sorpresa, el temor y la irritación de ciudadanos, y entre rumores de decomisos de mercancía pirata y armas de fuego, captura de presuntos delincuentes, detención y fuga de inmigrantes centroamericanos.

Cientos de policías, en varios retenes, como nunca se había visto

En este operativo sorpresa participaron cientos de elementos de varios cuerpos policiacos y funcionarios de los tres niveles de gobierno, entre los cuales El Faro pudo identificar a la Policía Federal (PF), la Agencia Federal de Investigación (AFI), la Policía Ecológica del Estado de Guerrero, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), el Instituto Nacional de Migración (INM), la Policía Preventiva Estatal de Guerrero (PPEG), la Policía Preventiva del Estado de Oaxaca (PPEO), la Policía Investigadora Ministerial del estado (PIM) y la Policía Preventiva Municipal de Cuajinicuilapa (PPM).

Helicópteros y avionetas de algunas de esas instancias y secretarías de gobierno también patrullaron el aire, por los mismos tres días, sobrevolando el área del municipio y de otros aledaños de Oaxaca, en apoyo a las acciones que en tierra emprendían los cuatro grupos.

Desde la noche del pasado viernes 14 de mayo, este operativo fue ejecutado instalándose cuatro retenes en el municipio de Cuajinicuilapa, particularmente en las vías que comunican a los estados de Guerrero y Oaxaca: uno de ellos, al norte de esta cabecera municipal, en la vía de terracería que comunica a Rancho Santiago, estado de Guerrero, y San Juan Bautista Lo de Soto, en Oaxaca, y llega a la carretera federal 200 a la altura de El Terrero, en Guerrero.

El segundo retén se colocó en la carretera federal 200 Acapulco-Pinotepa Nacional, en la salida oriente de esta cabecera municipal, en el entronque con la carretera Cuajinicuilapa-Punta Maldonado, que también comunica a este municipio con comunidades oaxaqueñas colindantes; el tercero, en la carretera Cuajinicuilapa-Punta Maldonado, en el entronque con la vía que va hacia Santiago Tapextla, Santo Domingo Armenta y Llano Grande, entre otras, todas ellas comunidades de Oaxaca.

La mañana del sábado 15, otro retén (además de los mencionados) fue instalado en el centro de la población, en la calle principal, entre el mercado municipal y el zócalo, en búsqueda de mercancía pirata y sospechosos, fundamentalmente.

Aunque algunos retenes se instalaron hasta el domingo 16; una de sus características fue que no eran permanentes sino que se colocaban por unas horas, se retiraban y volvían a colocarse sorpresivamente y en distintos puntos de las carreteras y terracerías.

Resultados no muy claros: desinformación, trascendidos y rumores

Aunque El Faro intentó conseguir información sobre el operativo con elementos de la AFI en el retén de la salida poniente de Cuajiniculapa (y le fue negada e incluso se le apercibió con amenazas no tan veladas para no tomar fotografías) trascendió que fueron descubiertos y capturados nueve inmigrantes ilegales, aparentemente procedentes de Centro América.

Versiones entre la población aseguraban que en realidad –en el caso de los nueve inmigrantes– se trataba de supuestos sicarios del grupo de los Zetas; incluso, se llegó a afirmar que todos ellos tenían el mismo corte de pelo y los distinguía una misma cicatriz en el cuello, además de vestir de modo similar.

La versión extensa de este hecho señala que el grupo originario estaba integrado por 18 personas; sin embargo, se fugó la mitad de ellos y su captura era el objetivo de la feroz búsqueda por algunos domicilios y tiendas de la cabecera municipal.

En los retenes, particularmente en el instalado en la carretera federal 200, los agentes policiacos interrogaban y revisaban a los hombres presuponiéndolos infractores de la ley o delincuentes; no era raro que intentaran bromear a costillas de los ciudadanos o que después de revisados los despidieran con un no tan gentil: “Esta vez te salvaste”.

Y no solamente allí: en la población, por ejemplo, capturaron a un hombre por el mero hecho de parecer sospechoso, pues cuando se acercaba a ellos tuvo un gesto de temor, motivo para que fuera atrapado como a culpable de algún delito; en este caso, el hombre no portaba identificación alguna, por lo que fue levantado sin que se conozca si fue devuelto a su vida cotidiana.

Una de acciones en este operativo de aparente limpieza criminalística era pedir la credencial de elector a cada ciudadano revisado en los retenes o sometido a escrutinio en la calle, para buscar en la base de datos de sus computadoras en espera de encontrar a delincuentes.

Se sabe que, de ese modo, se hicieron algunas detenciones de varios individuos, tanto de Guerrero como de Oaxaca, y que se pusieron a disposición de un Agente del Ministerio Público.

Fue detenido un taxista del sitio número uno, aparentemente por haber cometido un delito hace tiempo.

Se rumora que en poblaciones de Oaxaca, como Santo Domingo, hicieron decomisos de armas de fuego.

En los cuatro retenes, hombres armados con cámaras de video registraban los hechos.

Mercancía pirata y comercio ahuyentado

En comercios del centro de Cuajinicuilapa, elementos de la AFI decomisaron cientos, tal vez, miles de discos piratas, aunque también cargaron con aparatos electrónicos encontrados en esos establecimientos; se conoce que, cuando menos, a un comerciante lo atropellaron y maltrataron.

Este aparatoso operativo, realizado la mañana del sábado 14, hizo que los agentes del orden cerraran la calle principal y desviaran el tránsito vehicular, provocando especulaciones sobre detenciones de delincuentes o enfrentamientos con ellos.

Comerciantes fijos, en conversación con El Faro, se dijeron sorprendidos porque no había información sobre lo que estaba ocurriendo y porque el operativo parecía muy aparatoso y sin sustancia, toda vez que esos pequeños comerciantes no representan un peligro para nadie ni que se considera que su actividad sea delictiva, “en comparación con otras”, sin que se precisara cuáles.

Incluso, se asegura que este operativo inhibió las actividades comerciales cotidianas porque muchos de los vecinos de otras comunidades, de Guerrero y de Oaxaca, que habitualmente acuden a la cabecera municipal a surtirse de mercancías o productos de consumo, al ver el operativo “se espantaron y se regresaron a sus casas, sin hacer sus compras” habituales.

“…busca y busca y no encuentran nada”

Aunque, seguramente, el objetivo o los objetivos de una movilización tan grande (tal vez como nunca se haya dado una así en el municipio) sean benéficos para la población, en muchos de los ciudadanos quedan dudas, temores, resentimientos y otros sentimientos y apreciaciones negativas, dada la desconfianza que suscitan porque no resuelven los problemas de delincuencia que se padecen constantemente y sí suelen maltratar, impunemente, a quienes se les antoje.

Un hombre de San Nicolás resume esta actitud en pocas palabras: “Hombre, ¿qué tanto buscan?, ¿que no ya dieron cuatro vueltas por aquí, busca y busca y no encuentran nada?”.

1 comentario:

Javier Merchan Noyola dijo...

Amigo, vagando por este gran terreno de la informacion que hoy nos avasalla y que sin duda alguna vos me mostro el gusto al conocerlo de cerca el gusto por la lectura y me es grato decirle que reconosco y reciba una humilde felicitacion de Javier Merchan, a vuestra familia y principalmente a vuestro hermanos Jorge.
A partir de hoy sere su ferviente seguidor y si me da la oportunidad de escribir en su blog algo relacionado a la ciencia que se refiera a la educacion matematica o fisica, estoy a sus ordenes.

Me despdio y quedo a sus ordenes.

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